DIVISIÓN

A estas alturas, cualquier noticia del vicepresidente segundo es pura ingeniería del conflicto. Separar, confrontar, acusar, juzgar, destruir es el gran objetivo. Su objetivo y NO el nuestro. Llegó al gobierno para cambiar y quien haya esperado creatividades políticas dirigidas a resolver los problemas que complicaban nuestros días, ha sido un ingenuo. 

Hace ya más de 10 años atrás, en la Argentina, el poder de los Kirchner que comparte color con el de Iglesias en España, logró un amplio período de gobierno gracias a la ZANJA que supo fabricar. Familias divididas, amistades rotas e interminables peleas que cambiaron la prioridad del país sudamericano ubicando en las alturas como un sol que ilumina el "DIVIDE Y VENCERÁS"sobre las cabezas de todos los argentinos. 

Mientras tanto, el país envuelto en una gran confusión social, el gobierno bolivariano logró corromper todo tipo de poderes haciendo muy difícil removerlos del poder mediante unas elecciones democráticas.

Pero eso fue lo que ocurrió, algo les salió mal y fueron desplazados por 4 años aunque actualmente han logrado regresar como una enfermedad que se resiste abandonar a su víctima.

España puede ver el pasado de Argentina, pero niega que esa película pueda proyectarse en el gobierno de Sánchez. De nada ha servido la historia para evitar que hoy estemos subidos a la peor nave para surcar los problemáticos mares del siglo XXI.

Hoy pueden notar que son más los actos de confrontación y crispación por parte de Iglesias, que las soluciones a nuestros verdaderos problemas. 

Quemar España es su objetivo y repito, NO ES EL NUESTRO. Blindarse con las peores adolescentes de izquierda para avasallar cualquier clase de diálogo edificante, es la primera pieza movida este principio de semana. Y todas las semanas seremos testigos de nuevas y peores movidas.

Lograr establecer la GRAN ZANJA en España comienza a ser una realidad.